Detén las Interferencias y Ríndete al Dios Interior:

Es una de las reglas más importantes para manifestar. En el blog de hoy, no voy a explorar un método o técnica específicos, sino que me gustaría discutir por qué tu interferencia en el proceso, o mejor dicho, tu fracaso en rendirte, puede ser precisamente lo que está impidiendo que tu resultado deseado se manifieste en la realidad tridimensional. La necesidad de rendirse es fundamental para tu éxito.

El famoso místico Neville Goddard nos instruye que una vez que te hayas relajado en un estado similar al sueño, hayas imaginado y entrado en una escena del deseo cumplido, eso es prácticamente todo lo que tienes que hacer. Después de impresionar la mente subconsciente mediante este proceso, él cree que el resto del proceso, la expresión de tu deseo, está en manos de nuestro yo superior. El acto creativo solo ocurre una vez y germina como cualquier semilla que plantamos en la tierra, tiene sus propios medios y formas de expresión. De hecho, continúa diciendo:

“Ahora entrégate por completo al ser interior y permítele que lo externalice por ti, porque él conoce formas y medios que tú no conoces” – Neville Goddard.

La Importancia de Rendirse

La autoentrega es esencial y con eso se quiere decir la confesión de la impotencia personal. Neville Goddard

Entonces, ¿qué significa exactamente? Consideremos esta analogía: Supongamos que eres el CEO de una cooperativa masiva. Tu enorme red de empleados se encarga de la gestión diaria del negocio. Para cada faceta de tu empresa, hay cientos de empleados altamente capacitados mejor equipados para llevar a cabo las instrucciones específicas. Investigación y desarrollo, recursos humanos, marketing, contabilidad, ventas y publicidad, e incluso los limpiadores de oficina, todos los empleados están ahí con un propósito común: llevar a cabo tus instrucciones y hacer que tu empresa sea un éxito.

Tienes una persona de confianza, un gerente que ha estado contigo desde el principio. Es siempre fiel, siempre seguro y nunca te ha decepcionado en el pasado. Cuando tienes una nueva idea que deseas implementar, esta es la persona a la que le delegas la tarea. Después de todo, eres el CEO y no tienes tiempo para socializar con el personal, ¿verdad? Solo quieres que se cumpla tu deseo.

Ahora, si le has encomendado la tarea a este gerente, en quien confías implícitamente, ¿interrogarías, interferirías o interrumpirías constantemente su trabajo? No, porque si lo hicieras, harías que su papel quedara obsoleto y, lo que es más importante, socavarías la confianza en la relación.

Este ejemplo ilustra lo que significa tener un socio confiable al que recurrir para manejar tu tarea más importante. Recuerda que solo quieres resultados, es por eso que empleaste a esta persona en primer lugar.

Tu verdadero yo, Imaginación, tu YO SOY, fuente, Cristo interior o cualquier otro término que desees darle a este poder, podría asemejarse a este gerente, pero solo que infinitamente más poderoso y confiable.

Recuerda que hay dos pecados contra el espíritu santo: comer del árbol del bien y del mal y la falta de fe en el YO SOY. Es esta última con la que nos estamos preocupando aquí.

Si has delegado la manifestación a tu imaginación (YO SOY), entonces solo la falta de fe, la falta de confianza en este ser interior te hará fallar. Esta es la verdadera definición de pecado.

“Identifícate voluntariamente con lo que más deseas, sabiendo que se expresará a través de ti” – Neville Goddard

Entonces, ¿qué significa rendirse por completo? Significa ceder por completo al ser interior, permitir que él dicte la manera de expresión y detener al antiguo ego de interferir. Algunos lo llaman soltar y dejar que Dios actúe. Esto no significa tratar de pensar o buscar una solución, sino permitir que el sentimiento persistente de ya tener lo que deseas cree los medios para que suceda. Si deseas aprender más sobre los sentimientos, puedes consultar nuestra “Masterclass de Sentir es el Secreto” en Truecosmic Academy.

¿Qué es la Acción Inspirada?

Entonces, ¿qué hay de la acción? ¿Me quedo sentado sin hacer nada y espero que mi manifestación caiga del cielo? Es una pregunta común que me hacen y mi respuesta sería un enfático: no. En algún momento durante el proceso de manifestación, tendrás que actuar, y tal vez en más de una ocasión te verás obligado a hacer algo físico. A este proceso se le llama “puente de incidentes“; es algo de lo que hemos escrito en blogs anteriores. Permíteme explicar: tal vez estás imaginando que te han dado un ascenso en el trabajo, estás viviendo en el estado final y no interfieres en el proceso, pero en algún momento es posible que debas asistir a una entrevista con tu empleador, generalmente es un acto obligatorio para que el deseo se externalice.

Hay otra actitud que adopto y que creo que me permite actuar desde un lugar de ser en lugar de desear. A diario me pregunto cómo actuaría la versión de mí mismo que está experimentando su deseo hoy. ¿Qué pensaría, diría o haría? Luego me comporto en consecuencia durante el día. Operar desde este estado te proporcionará todas las adquisiciones necesarias para convertirte en esta persona.

El Socio Definitivo

” Mis caminos son más altos que vuestros caminos, mis caminos están mucho más allá de vuestro entendimiento” (REFERENCIA BÍBLICA)

Quiero terminar con este pensamiento final. Tu desafío o meta puede ser algo que tu intelecto no puede resolver. Tal vez simplemente no puedes ver una salida de tu situación, sin embargo, cuando entregas esto a tu imaginación, tu yo superior sabe que se lo has entregado a una inteligencia espiritual superior. Al igual que en nuestro ejemplo del CEO de la empresa, le has delegado esto a un socio que es siempre fiel y seguro. Tu YO SOY puede, si es necesario, llamar a miles de personas para externalizar tu deseo. Es omnipotente, omnipresente y tiene la capacidad de influir en eventos y personas. De hecho, cualquier cosa objetiva en el universo se originó en esta misma fuente. Solo tienes que creer que eres o que ya posees lo que deseas y permitir que este poder opere a través de ti.

¡Qué socio tener de tu lado!

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